III.
Formar una banda suena sencillo. Aún más cuando tienes los instrumentos a tu disposición, te llevas genial con tu grupo y no paran de soñar. Suena sencillo hasta que no coordinan en horarios, les persiguen un sinfín de peligros y, claro, estudian en un internado mágico donde pasan la mayoría del tiempo estudiando o evitando ser rostizadas por un ente desconocido.
Broken Glasses llevaba un par de meses de ser fundado. Las chicas tuvieron un momento de paz cuando todo el desastre que las acechaba terminó. Su verano en el resort se basó en practica, practica y más práctica.
–Eh, Da-eun, checa este compás.-- La voz de Skadi aparece, al igual que el sonido de sus botas, acercándose a la parte trasera del mini escenario, donde habían montado la batería de la asiática.
Song analiza las partituras, no tarda en entender.
–Bien, inicio a tu señal.-- La cueva de Broken Glasses poco a poco va tomando los distintos matices de las siete chicas, puesto a que cada vez los ensayos se tornan más frecuentes –y por qué no decirlo, eficientes–, cada una sabe domar su propio instrumento y más que eso, tienen una perfecta sintonía, tanto bajo como arriba del escenario. Son amigas, así que saben que están para apoyarse hasta en los peores momentos, incluso si la frustración va calando sus cuerpos porque necesitan que las cosas salgan bien.
Las baquetas de Da-eun suenan tres veces en el aire, chocando entre sí por orden de las manos de la coreana, marca el ritmo antes de empezar y tras ello, revienta el hit-hat con un golpe preciso y ahí, las chicas tardan pocos segundos en seguirla. Skadi se une con un hybrid picking, con ayuda de su púa con el sello de la serpiente los sonidos que emite la guitarra eléctrica son melodiosos junto a la guitarra acústica que pronto hace su entrada triunfal a manos de Hyacinth, quien había aprendido algunos acordes gracias al conocimiento de la semi-sirena, añadiéndole un tono más suave para equilibrar la canción, tanto como la voz de Melody que pronto entra en el ritmo, su dicción es precisa, la semi-sirena posee un tono que nadie puede igualar y se acentúa cuando las cuerdas de los bajos de Onyx y Karina se rasgan por las púas que también poseen, realizan una perfecta armonía a base de los punteos de ambas muchachas. Y culmina con los delicados dedos de Circe presionando las teclas indicadas para la melodía que estaban creando con ayuda de su teclado.
Eran la combinación perfecta, sus miradas se cruzan entre sí, llevaban días intentando terminar esa canción. Y lo habían hecho.
–Tías, esto va a ser un hit. ¡WOOOO! –la semi-sirena habla por el micrófono, las demás carcajean en lo que cada una hace lo propio con su instrumento, generando que varios sonidos de alegría se fundan en solamente uno.
Pero no todos los días eran así, otros, como al siguiente día, intentaban lograr sacar un cover y acertar el ritmo de una persona ajena a tu banda, era un poco más complejo. Da-eun siente frustración cuando el bombo no golpea en los momentos indicados, eso la hace presionar con más fuerza, provocando que el sonido emitido sea desagradable. En otras ocasiones el problema era la velocidad de los dedos de Circe, o la fuerza con la que presionaban las cuerdas de las guitarras y bajos, causando que las cuerdas se salgan del instrumento, teniendo que cambiarlas cuando eso sucede; es lo que sucede cuando estás en una banda, sin embargo, la siete chicas tienen el ritmo en la sangre y más poderoso que eso, no piensan rendirse, tienen como meta: sonar a la perfección para conquistar oídos y miradas, porque cada una posee su encanto, tanto grupal como individual. La presencia escénica recorre las venas de las siete. Saben que están preparadas para dar el siguiente paso, han estado meses trabajando para que llegue el gran día, en el cual se darán a conocer ante todos, donde solo debe fluir la música y su amor por la música.
Por eso mismo no importaba cuantas veces Onyx y Hyacinth pelearán por la descoordinación, tampoco las casuales molestías de Karina y Skadi ni las miradas cómplices de Melody y Da-Eun. Sí, eran todas amigas, pero eso no significaba que siempre estuvieran de acuerdo con todo. Es más, incluso al ser tantas y con variedad de actitudes y personalidades, sin embargo, al momento de comenzar su espectáculo, de momento, privado, rompían con cualquier malentendido. La sincronía y entendimiento que manejaban era innegable, estaban hechas para tocar juntas.
Las horas se transformaron en días, las tardes en semanas que se convirtieron en meses.
Empezar un grupo musical desde cero no era un trabajo fácil, pese a que todas nacieron con la dádiva del gen musical, tuvieron que esforzarse hasta ajustarse a un rompecabezas único en el que todas eran una pieza indispensable; cada nota dispersa se transformó en una armonización al compás, que terminó por encajar de forma perfecta.
Las composiciones estaban listas, ellas dispuestas y la sintonía preparada, solo hacía falta una cosa más.
— Sí, ¿dónde podemos iniciar? — Circe, leyendo involuntariamente los pensamientos de Melody, habría respondido lo que en la mente de la pelirroja se cruzaba.
La atención del grupo se giró a la conversación, unas propusieron un club muggle, sin embargo, desde algunas perspectivas era algo mundano y otras imaginaron todos los caminos, los cuales probablemente traerían problemas en un futuro, lo que las llevó a inclinarse por el mundo mágico.
Razonamiento, palabras e ideas, el bullicio se detuvo cuando la voz de Skađi irrumpió una vez más aquella discusión.
— ¡Lo tengo! Aparezcan el viernes en la noche afuera de la principal, tocaremos en The Spellbound Lounge.Miradas curiosas, jadeos de sorpresa y asentimientos incrédulos fueron las respuestas otorgadas. La confianza era tanta que con sencillez, se dejaron llevar. ¿Cómo conseguiría un espacio en tan importante escenario? En su mayoría lo dedujeron a su apellido, pero la noruega tenía un as bajo la manga.
——
La tarde del esperado día se hizo llegar, Grindelwald unos días antes había conseguido escabullirse al interior de Spellbound Lounge, el legendario famoso bar. Un lugar tan demandado que incluso entrar en la lista de espera era todo un logro.
Gracias a sus cualidades híbridas, con un par de sonrisas y mentiras, consiguió ingresar para observar, tan pronto pudo detallar los movimientos de su alrededor, las miradas caían sobre ella como fichas de dominó; aquellas cargadas de rechazo se distinguían notablemente de las de atracción, pero ella no buscaba eso, sino a la persona a cargo del evento que estaba en boca de toda la comunidad mágica, no tuvo que dar otra vuelta, el eco rítmico de los tacones, resonaron marcando la presencia de a quien tanto buscaba, para su buena suerte, no había ni una pizca de desagrado en su semblante.
Una media luna formada, y un par de palabras con un deje de elegancia, las dos figuras femeninas fueron encaminadas hasta lo que parecía ser un despacho. En el ámbito de la privacidad, Skađi se aseguró que no hubiera ni una persona más antes de iniciar los movimientos fluidos que se convertirían en una danza vital que cautivó en absoluto a Jane, una mujer que controlaba cada pequeño detalle, a excepción de claro, la seducción realizada por la veela, por lo que gracias a su habilidad, no tiene de otra más que aceptar hasta modificar su esquema; Broken Glasses tocará esa noche en la celebración del aniversario 75, rostros jóvenes y adultos en su reunión más política que inocente, serían testigos de su gran debut.
——
Con la niebla que anunciaba la noche ideal, el reflejo dorado de los adornos que colgaban por todo el lugar, se pintaba en el mármol por el que caminaban las siete almas que esperaban con emoción detrás del escenario, separadas únicamente por una gran cortina plateada, escuchaban las voces sobre el instrumental que estaba de fondo, todos bebían y hablaban de cualquier tema de importancia suficiente que tuviera un mínimo impacto en la sociedad, sin embargo, el grupo femenino apenas y podía poner atención a las múltiples conversaciones que se generaban más allá.
Todas con sus instrumentos y ataviadas con prendas negras que reflejaban el estilo único de cada una, se acomodaban repetitivamente los pañuelos de colores distintivos que las asiáticas consiguieron; Hyacinth acomodó su accesorio grisáceo en su muñeca izquierda, mientras su prima Onyx amarró el suyo de tonalidad esmeralda en la derecha, Song utilizó su pañuelo morado como liga para reafirmar su coleta, Melody lo transformó en un cinturón rosa salmón, Circe lo adjuntó como un collar azul, Karina se lo dejó como un top rosáceo pastel y Skađi resaltó sus características trenzas con la tela carmesí.
Ansiosas, maquilladas y preparadas, escuchan el último llamado realizado por el micrófono.
— ¡Con ustedes, Broken Glasses!
Hyacinth Flamel ; violinist. cephyr | |
permisos de mención Clic aquíintención de la historia- Validar la constante práctica del grupo formado por las chicas ; broken glasses.
- Validar que mantienen ensayos seguidos, y si bien son muchas opiniones que llegan a tocar, congenian a la perfección al tocar.
- Validar su primera presentación en un bar mágico, donde les ofrecen el escenario para ensayar con tal de atraer a más gente.
- Pasivas individuales y/o grupales que el validador vea conveniente.
links importantes- Historia del conocimiento de Da-eun en la bateria y diario de HCH: X y X
- Historia del conocimiento de Melody en la música, canto, composición y diario de hch: X, X y X
- Historia de teclado de Circe y diario de HCH: X y X
- Historia del conocimiento del bajo de Onyx de sus sus amigos raros y diario de HCH: X y X
- Historia del conocimiento de Skadi en la bateria y diario de HCH: X y X
- Historia del conocimiento del violín y diario de HCH de Hyacinth: X y X
-Historia de los conocimientos musicales de Karina: X
- Prueba del evento "the deadpool list": X
Aclaratoria:
1, Todos los personajes involucrados pertenecen a la comunidad lgtbq+, siendo bisexuales o lesbianas. Por ello, la pasiva de Skadi es positiva en ellas.
2. Esta es una historia continua por lo cual cualquiera de las involucradas subirá, cada cierto tiempo, un capitulo.